Escrito en 2013, lo saco de naftalina porque la cosa salió cierta y además ha empeorado desde entonces. Podemos tranquilamente sustituir el 15% por el 30%, mirando cómo va la cosa últimamente...
En las últimas semanas tuve la oportunidad de leer el artículo escrito por David Simon y publicado en “The Guardian”. También, el placer de ver la maravillosa película titulada: 12 Años de Esclavitud, de Steve McQueen. No es aquel chulo McQueen que conocemos, este es el otro.
El artículo
Por si no quieren leer el artículo, les voy a resumir lo expuesto en él. Se describe la actual situación socioeconómica en los EE.UU a finales de 2013. El artículo es profundo, os recomiendo leerlo en su totalidad. El resumen, que servirá para lo que voy a decir al final, prosigue:
Cada día hay más y más personas que caen en la desgracia económica, mientras los pocos ricos siguen aumentando su fortuna. Eso, en sí mismo, no es nada nuevo. Consta como parte de un ciclo histórico y suele acabar mal para todos. Lo nuevo, y según el artículo de David, es la elevada probabilidad de llegar a tener la economía de EE.UU en un estado de crecimiento estable y al mismo tiempo ignorar al 15% de la población que no importa para la misma. Repito, 15% de población “no importa” para la economía. Dos Américas en una y con eso un día habrá dos Europas en una.
La diferencia. Si lo comparamos con el periodo pre-capitalista, cuando los reyes buscaban la manera de extraer beneficios del pueblo, los querían incluir en el ciclo económico porque los necesitaban y ahora, los quieren excluir porque no los necesitan más.
Si ese 15% vive o muere, son o no son analfabetos, están sanos o no - qué más da. Si comen, enferman, roban, trabajan o no, qué más da. No importan o no cuentan para la economía del país. El NASDAQ no se moverá ni un punto en la bolsa aunque todos ellos se mueran en el mismo día.
A lo mejor, mantenerlos aislados hasta que morirán todos será un gasto deseable para el gobierno. Un justificante para las policías y los drones, vigilando ambos lados de un nuevo muro por construir. ¡Vaya futuro!
La pelicula
En la arriba mencionada película tratan de la esclavitud en el sur de EE.UU en la época del siglo diecinueve. Como sabemos, la esclavitud era una base fundamental sobre la cual se construyó el monstruoso sistema económico sellado por el racismo. Lo llamaré por su nombre de verdad. El fascismo. Porque fue una decisión política planificada e intencional, como la energía nuclear un siglo más tarde.
Toda la historia de la humanidad está perplejamente llena de esclavos y racistas, con la diferencia de que cualquiera podría acabar como un esclavo, dependiendo básicamente de su poder militar y de la voluntad del otro y no del color de su piel. Pero en el delta de Misisipí hubo algo más. Por aquellas aguas y tinieblas se extendió un mal pervertido, algo primario, sacado de lo más mal animal en el homo sapiens con la piel de color blanca.
Aun así, es comprensible el hecho de que un esclavo en una plantación de algodón era imprescindible para la economía. Él no se beneficiaba de ella, pero sí que “importaba” para la misma. Y en aquel delta de Misisipí, perdiendo la guerra civil y sin esclavitud, toda la economía se fue al carajo. Jamás después alguien plantó la semilla del algodón. Después encontraron el petróleo, cabrones. Vaya justicia.
Pero, lo incomprensible es lo que pudiera pasar mañana en el país que ahora acoge aquel lugar y aquellas tinieblas. Un país inmensamente rico donde, con todos los conocimientos de las ciencias de humanidades, de la ética, de la economía y con modernos inventos tecnológicos, ahora "hablamos" de poder tener al 15% de la población (45.000.000 de personas) que no importan para la economía del país. Ni siquiera los necesitan para ser esclavos. Qué triste. Nunca lo imaginaba así. Espero que yo solamente estoy viendo algo por aquí, por donde no hay nada.
De paso, ¿eres trabajador/empleado en 2013 y no un esclavo porque quizás eres más barato así, que mantenerte como un esclavo?
Нравоучение
Pues, mi querida Europa, defiéndete de ese precipicio. El fascismo por venir esta vez no vendrá de Berlín o Roma. Tendrá la forma de las corporaciones y los blancos millonarios gringos con sus generales y portaaviones, mira cómo ya te espían y saben todo. A mí me parece un acto de hostilidad. No nos vamos a equivocar esta vez, las ideas del señor Marx, sufridas durante muchos años por los europeos de este, son nada más que eso, unas ideas y no hay algún futuro próspero en el camino hacia el comunismo. Pero debemos mantener nuestro actual sistema socioeconómico, construido lentamente por encima de las ruinas y vergüenzas del año 1945, donde cada uno de nosotros debe importar en la sociedad y en la economía.
Aquí y hasta ahora, al nacer en este país “importamos” para la economía del país. Quizá unos son favorecidos y otros son algo más que solo desafortunados y serán siempre un gasto común y repartido entre todos. Pero es mejor intentar levantarlos con un sistema que les proporcione sanidad, educación y ayudas sociales. Si lo único que hacemos es asalariar un par de policías de más, para alejarlos de los ojos que no vean, no llegaremos muy lejos...
Aquel ciclo histórico antes mencionado siempre empieza de la misma manera, y luego con los palacios reales se convierten en bonitos museos.